En mi visita al Santuario de Sor Teresa de los Andes me pregunté...
¿Qué pensará ella de este lugar?
Es algo así como el mall del Dios, con chapitas, velas, figuritas (de madera, fierro, que brillan en la oscuridad), calcomanías, un casino con comida a precio de oro, aportes voluntarios desde el baño hasta la bendición de autos, vendedores ambulantes que, ojo!, sólo se aceptan hasta la mitad del santuario por ser un lugar de oración y un sin número de rituales comerciales que existen únicamente allí.
Es algo así como el mall del Dios, con chapitas, velas, figuritas (de madera, fierro, que brillan en la oscuridad), calcomanías, un casino con comida a precio de oro, aportes voluntarios desde el baño hasta la bendición de autos, vendedores ambulantes que, ojo!, sólo se aceptan hasta la mitad del santuario por ser un lugar de oración y un sin número de rituales comerciales que existen únicamente allí.
já.
Sor Teresita, descansa usted en paz? ~